"Las indagaciones" de Carlos Bueno Vera: "Un libro múltiple", por Lola Nieto
"Las indagaciones" de Carlos Bueno Vera: "Un libro múltiple", por Lola Nieto
Se cree que indagar proviene del prefijo indu-/ind- (en el interior) y el verbo agere (mover, llevar). Indago era una técnica de caza: se provocaba el movimiento de la presa hasta que caía en el interior de un recinto cerrado por cuerdas o redes.
En Las indagaciones de Carlos Bueno Vera, la caza es múltiple y de ahí el plural. La escritura traza cercos: escenas teatrales, diálogos filosóficos, fábulas irónicas y precisas, narraciones de acuáticas y escabullidas moralejas, poemas.
Hay personajes: Hecho y Objeto, Promesa y Sospecha, que como personajes beckettianos, a veces, y tiernos animalitos desdentados, otras, intentan pensar, ocupar su tiempo en una mente que repite y busca en el eco una representación válida, una cuerda con la que atrapar algo.
Y luego está el amor. Lo que sea que eso signifique. El amor como un cerco siempre abierto, fulgurante, la fuente que siempre mana y se desgasta, pero es hermosa y triste.
Las indagaciones es un libro sobre el libro, un libro atravesado de escrituras como redes que procuran apresar algo, cazar pestañas de ojos y tantear la cosa esta que llamamos mundo. Aunque quienes salen de caza vuelven siempre con fantasmas pegados a la trama. La delicia es hablar con ellos.